2nd (Segunda parte) Un Día

A song:http://www.youtube.com/watch?v=D8Ymd-OCucs

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                        [+]     Por darte unos padres maravillosos que cuidaron de ti y te enseñaron todo lo que sabes, por poder aprender de la vida en cada instante, por ver que en lo sencillo de las cosas se esconde lo más grande. También por haber tenido la suerte de conocer a grandes personas que hicieron tu camino mucho más fácil la mayor parte del tiempo, y a las personas que te lo complicaron obligándote a mejorar. Ese día te olvidas del trayecto al trabajo y de los semáforos que tan solo te dan unos escasos segundos para cruzarlos. Te desplazas inconscientemente hacia el parque principal de tu pueblo o ciudad y te dejas caer en un banco. Puede parecer azar pero ese es el banco en el que te tenías que sentar. Desde ahí, puedes ver como la vida pasa ante tus ojos y ser la única persona que se de cuenta. La gente que pasa, los coches en movimiento, ninguno tiene tu perspectiva. En silencio, lo saboreas como un caramelo de tu sabor preferido. Los árboles muestran ese aire que no se ve. 

  Ya atardece. La tranquilidad se apodera de tu cuerpo y tu confianza es máxima. Ahora viene lo peor porque el día se acaba y te apetece volver a casa, pasando por todo el miedo del principio. Y todavía tienes que morir. Vas mirando a todas partes con los ojos medio desorbitados. Sorprendentemente, nadie se fija. Bueno, nadie no. Un niño pequeño de ojos grandes te observa extrañado justo antes de desviar su cabeza hacia algo más interesante, olvidándose por completo de lo que acaba de ver. Tu frente está sudada y cada vez que pasas por delante de un bar, la luz refleja las pequeñas gotas que segregan tus poros abiertos. Al final de la calle, tu piso. Por fin llegas y subes corriendo las escaleras. Dos plantas. Entras y cierras la puerta a la vez que sueltas un suspiro. Te sientas en el sofá y aprietas los ojos fuertemente. Apenas puedes reflexionar pero descubres que el último día lo quieres solo para ti porque no te has atrevido a molestar a nadie. El último día se acaba; te duermes. No te mueres. La vida sigue. Y es que hay que morir un día para vivir todos los que nos quedan.

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